¿Chupones? Sigue estos pasos para deshacerte de ellos

Cuando mis amigas y yo teníamos unos 13 años, solíamos dárnoslos unas a otras (porque estaba de moda), pero ahora igual te llevas una bofetada si intentas dar uno. Por supuesto, estoy hablando de chupones. El tipo de beso que, además de un rollo algo posesivo, también deja una mancha fea. ¿Quieres saber cómo deshacerte de un chupón? Pues sigue leyendo. 

¡Recuérdalo! Los chupones son moretones y no existe una crema mágica o suero que los cure de la noche a la mañana. Sin embargo, lo que sí puedes hacer es mantener la calma y seguir estos ocho pasos. Te prometo que notarás la diferencia. Y con rapidez.

Paso 1: Utiliza una cuchara fría

Vale, deja todo lo que estés haciendo. Coge una cuchara limpia y ponla en el congelador entre ocho y diez minutos. Frota la zona del chupón con la cuchara fría. El frío ayudará a minimizar el goteo de sangre de los vasos sanguíneos hacia la piel. Repite este proceso varias veces al día para reducir la hinchazón. ¡También puedes usar una compresa fría!

Paso 2: Aprovisiónate de piña fresca

La piña no solo se conoce como un medio para provocar contracciones, sino que también es un remedio fantástico contra los chupones no deseados. La piña contiene una enzima llamada bromelina que realmente ayuda con los hematomas. El siguiente paso es salir corriendo al supermercado para comprar una piña fresca. No tienes que presionarla contra el chupón, simplemente puedes comerte la piña (en tu pizza, no entraremos a juzgarte) o hacer un buen zumo con ella.

“La piña contiene una enzima llamada bromelina que realmente ayuda con los hematomas”.

Paso 3: Vitamina K

La vitamina K, que se encuentra en alimentos como el brócoli, la col rizada, las espinacas y el arroz integral, ayuda a tu cuerpo a absorber los coágulos de sangre acumulada, como tu chupón. Así que cómete una ensalada o echa un poco de col rizada en tu batido para que tu chupón se cure antes.

Paso 4: Hidrátalo con aloe vera

Dato curioso: el aloe vera es mucho más que una planta viscosa que sienta muy bien cuando has estado al sol demasiado tiempo. Gracias a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, una fina capa de crema o gel de aloe vera puede evitar que el chupón se hinche. Ten en cuenta que aplicar aloe vera a tu chupón dos veces al día no lo hará desaparecer por arte de magia, al fin y al cabo es un hematoma, pero sin duda ayudará a acelerar el tiempo de curación.

Paso 5: Masajéalo con cáscara de plátano

Sí, te estoy oyendo pensar: “¿qué diablos es esto?”, pero las cáscaras de plátano en realidad son el héroe olvidado de la lucha contra los chupones, ya que están repletas de antioxidantes y vitaminas que suavizan la piel. Retira la cáscara de un plátano maduro y simplemente frótala.

“Las cáscaras de plátano son el héroe olvidado de la lucha contra los chupones”.

Paso 6: Aplica una toallita caliente

Vale, ya han pasado unos días desde que te hicieron el chupón y, a pesar de seguir todos los pasos, ¡esa cosa fea sigue ahí! Ha llegado oficialmente el momento de recurrir a la ayuda de una toallita/bolsa de agua caliente. Calienta una toallita y presiónala contra la zona del chupón durante unos 5 minutos.

Paso 7: Aplica una crema con vitamina C

Lo más probable es que la vitamina C ya forme parte de tu rutina de cuidado de la piel. Este ingrediente increíblemente efectivo ayuda a estimular la producción de colágeno de tu piel (también conocido como lo que hace que tu piel tenga un aspecto suave y saludable), lo cual es bastante importante si estás tratando de curar un chupón. Una vez más, no esperes milagros, pero aplicar una crema con vitamina C en el área afectada durante el proceso de curación es una decisión inteligente.

Paso 8: Utiliza tu cepillo de dientes

Esta no sería una buena guía de supervivencia frente a chupones si no mencionara el método del cepillo de dientes. Utiliza un cepillo de dientes con cerdas súper suaves (¡importante!) y pásalo con cuidado por el chupón para estimular la circulación sanguínea. Es importante que muevas las cerdas en distintas direcciones para permitir que la sangre coagulada pueda dispersarse. La sensación no será muy agradable, pero si lo haces todos los días entre unos cinco y diez minutos, tu chupetón se desvanecerá con rapidez.

“Mueve las cerdas en distintas direcciones para permitir que la sangre coagulada pueda dispersarse”.