Cómo resolver los problemas de erección

Casi todos los hombres alguna vez tienen problemas para lograr una erección completa. En ese caso, la erección no es lo suficientemente firme para la penetración o se vuelve flácida a mitad de la penetración y antes del orgasmo. En general, el problema desaparece por sí solo. Sin embargo, cuando un trastorno perdura o se presenta con más frecuencia, hablamos de disfunción eréctil o impotencia. Un problema de erección puede tener como base problemas tanto psicológicos como físicos. La disfunción eréctil puede ser bastante molesta y tener un impacto significativo en la confianza en ti mismo, tu relación y tu vida sexual.

Aunque muchos hombres experimentan un problema de erección a lo largo de sus vidas, rara vez se habla de ello. Por lo tanto, muchos hombres no saben cómo solucionar estos problemas. En este artículo, hablaremos sobre varias posibles causas de los problemas de erección y una serie de soluciones para resolverlos.

Causas de la disfunción eréctil

La disfunción eréctil puede tener causas tanto psicológicas como físicas. Los problemas psicológicos son la causa en aproximadamente un tercio de los hombres con problemas de erección. El mismo número de hombres presenta una causa física subyacente a su problema. El otro grupo de hombres tiene que ver con ambos factores. Cuando tienes una erección por la noche o por la mañana, pero no durante las relaciones sexuales, los problemas casi siempre son de naturaleza psicológica.

Problemas psicológicos

La depresión, el estrés y el miedo al fracaso son ejemplos de problemas psicológicos. El estrés puede surgir, por ejemplo, en el trabajo o en las relaciones. Tu cabeza no está del todo a lo que tiene que estar, lo que significa que a veces falta la excitación que se requiere para una buena erección.

A veces, todo el mundo puede encontrar difícil lograr una erección firme, por ejemplo, debido a la fatiga o por otra razón. Algunos hombres se lo toman muy a pecho, porque sienten que están decepcionando a su pareja. En ese caso, pueden tener miedo de que vuelva a suceder y, en el peor de los casos, pueden desarrollar miedo al fracaso. Además, también puede suceder que un hombre se sienta menos atraído por su pareja, por lo que faltarán los estímulos sexuales para lograr una erección.

Mal estilo de vida

Un estilo de vida poco saludable también puede contribuir a un problema de erección. Los malos hábitos, como fumar o el consumo excesivo de alcohol y drogas, pueden afectar al flujo sanguíneo al pene y provocar que se vuelva menos duro o que aguante menos. El alcohol y las drogas también pueden causar fatiga, lo que impide que el hombre tenga una buena erección.

Lo mismo ocurre con una mala nutrición y un ejercicio físico insuficiente, que pueden provocar problemas a largo plazo, como presión arterial elevada y colesterol alto. El colesterol alto a largo plazo y la presión arterial elevada pueden contribuir a la obstrucción de las arterias. Como resultado, al pene le resulta más difícil llenarse de sangre, lo cual es necesario para obtener una erección firme.

Enfermedades crónicas

Varias enfermedades crónicas también pueden contribuir a una mala circulación sanguínea y, por lo tanto, a un problema de erección. Algunos ejemplos son los trastornos cardiovasculares, los trastornos neurológicos como la esclerosis múltiple y el Parkinson, y los problemas del tracto urinario o de la próstata. Las investigaciones han demostrado que aproximadamente el 70% de los hombres con diabetes experimentarán disfunción eréctil a lo largo de su vida.

Algunos medicamentos

Determinados medicamentos pueden alterar gravemente el equilibrio hormonal. Una alteración en la hormona sexual masculina (testosterona) a menudo resulta en una libido baja y puede provocar disfunción eréctil. Los betabloqueantes, que reducen la presión arterial, y varios antidepresivos tienen efectos secundarios que afectan negativamente a la erección.

Suelo pélvico

La disfunción eréctil también puede estar causada por un suelo pélvico demasiado tenso. Cuando hay demasiada tensión en los músculos del suelo pélvico, el hombre puede tener más dificultades para lograr una buena erección.

Cirugía de próstata

La cirugía de próstata también puede ser uno de los motivos por los que no puedes lograr una erección. A ambos lados de la próstata discurren unos nervios que influyen en si tienes o no una erección. En algunas cirugías de próstata, estos nervios se ven afectados hasta tal punto que ya no es posible lograr una buena erección.

Determinar la causa de la disfunción eréctil

El primer paso para determinar las causas de la disfunción eréctil es visitar al médico de cabecera. Un examen físico y una serie de preguntas ayudarán a determinar si existe un problema médico o psicológico. Las preguntas pueden ser sobre el uso de medicamentos, la calidad de tu relación o si tienes o no erecciones matutinas y nocturnas.

Para determinar el estado del suministro de sangre, el médico puede observar el latido de los vasos sanguíneos en la ingle o el espacio poplíteo. Si el resultado no es bueno, es muy probable que la circulación sanguínea en la pelvis tampoco funcione de manera óptima. Las vías nerviosas también pueden verificarse probando los reflejos. Cuando se encuentran anomalías físicas, por lo general se deriva al paciente a un urólogo u otro especialista. A los hombres con problemas de erección como resultado de una causa psicológica a menudo se les deriva a un sexólogo o psicólogo.

Solucionar los problemas de erección

Eliminar las causas psicológicas

Durante la consulta con el médico de cabecera, se hacen varias preguntas si se sospecha que los problemas están causados por estrés, problemas de pareja u otros factores psicológicos. El propio médico de cabecera puede llevar a cabo estas averiguaciones, pero algunos hombres también pueden ser derivados a un sexólogo. Cuando el médico de cabecera o el sexólogo ha determinado qué factores psicológicos son la causa de tu problema de erección, a menudo recibes una serie de ejercicios para practicar en casa y se establece un objetivo.

Algunos de los ejercicios para practicar en casa son los siguientes:

• Aprender a comunicarte mejor con tu pareja sobre tu problema de erección.
• Ejercicios de caricias para saber qué estímulos sexuales te excitan.
• Ejercicios en los que aprendes a lidiar mejor con las incertidumbres.

Además, se puede utilizar la terapia cognitiva para eliminar ciertos miedos. La terapia cognitiva intenta eliminar ciertos pensamientos negativos. A menudo, somos nosotros mismos quienes mantenemos ciertas suposiciones y creencias. En la terapia cognitiva, el sexólogo y el cliente examinan juntos si esos pensamientos negativos realmente se basan ​​en la verdad. De esta forma, a menudo se anima al cliente a entablar una conversación con su pareja y, en ocasiones, ciertos pensamientos resultan ser erróneos. Este tipo de conversación puede eliminar mucha tensión e incertidumbre.

Medicamentos

Hoy en día, existen varios medicamentos con los que los hombres con problemas de erección pueden volver a lograr una erección. Si la causa es física, a menudo se receta una ayuda para la erección. A través del médico de cabecera se pueden conseguir varios medicamentos para la erección, que aseguran un mejor flujo sanguíneo en el pene, lo que facilita la erección. No obstante, para lograr una erección con una ayuda para la erección, es necesaria la excitación sexual.

Sin embargo, los medicamentos para la erección no eliminan la causa de la disfunción eréctil y además pueden tener efectos secundarios negativos. Por esa razón, se aconseja a los hombres con problemas cardíacos que no usen medicamentos. En Internet también se ofrecen varios medicamentos para la erección, cuyos efectos secundarios y componentes a menudo no se conocen bien. Por eso es recomendable comprar las pastillas con una receta de tu médico.

Bomba de pene

Una bomba de pene, también llamada bomba de vacío, es un cilindro que se desliza sobre el pene. Mediante una bomba, en el cilindro se crea un vacío. Esto hace que los vasos sanguíneos en el eje del pene se ensanchen y fluya más sangre hacia ellos, lo que provoca una erección más grande y firme. Si a continuación se coloca un anillo de pene, la erección se puede mantener durante un periodo de tiempo más largo.

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Anillo para el pene

Un cockring o anillo para el pene es un anillo que se desliza alrededor del eje del pene y, a veces, también alrededor de los testículos. Como el anillo es bastante apretado, retiene la sangre en los cuerpos cavernosos. Esto asegura una erección firme que dura más tiempo. Al igual que las pastillas para la erección, un anillo para el pene puede ser una solución para los problemas de erección. Para evitar el estrangulamiento del pene, un anillo para el pene no debe utilizarse durante más de 30 minutos.

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Ejercicios del suelo pélvico

El entrenamiento de los músculos del suelo pélvico tiene muchos beneficios, que son notables especialmente a largo plazo. Por ejemplo, ayuda a contrarrestar la incontinencia a edades más avanzadas.
Los ejercicios del suelo pélvico (también conocidos como ejercicios de Kegel, en memoria del ginecólogo estadounidense Arnold Kegel, quien los desarrolló por primera vez) también resultan muy útiles cuando un hombre sufre problemas de erección debido a un flujo sanguíneo deficiente.

Al entrenar regularmente el suelo pélvico, estos músculos requieren más suministro de sangre del cuerpo. Las venas que irrigan de sangre el suelo pélvico continúan a través del pene. De este modo, el pene recibe un mejor flujo de sangre gracias a los ejercicios del suelo pélvico, también llamados ejercicios de Kegel. En muchos casos, esto puede resolver parcial o totalmente los problemas de erección.

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