Cómo hacer una felación

Dar o recibir sexo oral es quizás la parte más íntima del sexo con una pareja. Mientras que la penetración puede resultar bastante cruda y a veces incluso distante, el sexo oral en realidad es muy íntimo. Te vuelves muy vulnerable al darlo y al recibirlo. Y es que, cuando eres tú quien lo da, es posible que tengas que lidiar con inseguridades sobre tus habilidades orales. ¿Lo estoy haciendo bien? ¿Le está gustando? ¿Cuánto tiempo debo continuar? En este artículo te damos algunos consejos básicos para hacer una felación inolvidable.

¿Qué es una felación?

Mamada, blow job, chupada, felación, sexo oral… hay muchos nombres para la estimulación oral del pene. Y todos estos nombres tienen un significado literal diferente: blow job sugiere la idea de soplar, mientras que chupada significa lo contrario. En general, todos sabemos lo que se entiende por “felación”. Te metes un pene en la boca y lo mueves hacia arriba y hacia abajo, ¡pero los distintos nombres pueden hacer que resulte bastante confuso! Por lo tanto, no es de extrañar que no estés segura o que tengas preguntas sobre cómo dar sexo oral. Por eso te ofrecemos algunos consejos con los que podrás empezar.

¿Cómo se hace una felación?

Le haces una felación a tu pareja (sexual) porque quieres mimarlo y darle algo delicioso, ¡pero no te olvides de que practicas sexo sobre todo para ti! De este modo, hagas lo que hagas, puedes, o más bien debes, disfrutarlo tú misma. A algunas personas no les gusta nada hacer una felación y eso está bien. En ese caso, tampoco tienes por qué hacerlo.

¿Te gustaría hacerle una felación a tu pareja, pero no sabes por dónde ni cómo empezar? Pues lee nuestros consejos a continuación.

“¡No te olvides de que practicas sexo sobre todo para ti!”

Lento y constante

Como en todos los actos sexuales con una pareja, “lento y constante” son las palabras mágicas. No querrás ir directa a tu objetivo con toda tu energía. Así que no solo le quites los pantalones a tu pareja (sexual) y te metas su pene hasta lo más profundo de tu garganta. No, mientras lo besas, primero desliza tu mano sobre su pene, luego mastúrbalo y a continuación mueve lentamente tu cabeza hacia abajo. Mientras tanto, bésalo en la mandíbula, en el cuello, la nuca, el vientre… Cuando finalmente llegues a su pene, continúa con calma.

Primero, besa las ingles y la parte inferior del pene. Besa y lame el eje del pene lentamente y acaricia el glande con la lengua y los labios húmedos antes de meterte el pene completamente en la boca. Muévete lentamente y mantén lo que estés haciendo durante un tiempo antes de pasar al siguiente punto. ¡Así es como harás que pida más!

Comunícate

El sexo es complicado, pero se vuelve más fácil con la comunicación. No hay dos personas iguales, por lo que no existe una fórmula o técnica mágica que haga que todo el mundo llegue al clímax. Lo que a una persona le parece genial, puede que no tenga ningún efecto en otra, así que la comunicación también es muy importante a la hora de hacer una buena felación. A algunos les gusta rápido, a otros lento. Por lo tanto, lo mejor es preguntarle si le gusta y si tienes que moverte más fuerte/más suave/más rápido/más lento.

Comunícale que a ti también te está gustando. ¡Así que gime de vez en cuando y demuestra que también lo estás disfrutando!

“No hay dos personas iguales, por lo que por desgracia no existe una fórmula mágica que funcione para todo el mundo”.

Un delicioso regalo

Después de llegar lentamente a su pene, llévatelo a la boca. Lo bueno es que tu boca está naturalmente húmeda y solo se mojará más durante la felación. ¡Esto hace que sea más fácil para ti y más placentero para él! A continuación, no es solo una cuestión de moverse hacia arriba y hacia abajo. Es un poco como si acabaras de descubrir el bastón de caramelo más delicioso del mundo. Quieres saborearlo por completo y, mientras mueves la boca de arriba a abajo, tu lengua se desliza por todos lados. ¡No quieres perderte ni un centímetro de esta delicia!

“Es un poco como si acabaras de descubrir el bastón de caramelo más delicioso del mundo”.

Las manos sí, los dientes no

No te olvides de las manos al hacer una felación. Utilízalas para mimar sus testículos y masturbarlo al mismo tiempo. Piensa en tu mano como una extensión de tu boca y mueve la mano y la boca al mismo tiempo. ¡No utilices nunca los dientes!

Por cierto, también puedes usar la mano que te queda libre para tocarte. Pregúntale con cautela qué piensa al respecto, pero a la mayoría de los hombres les resulta muy sexy verte jugar contigo misma mientras le haces una felación.

Chupar

No tienes que fingir que estás chupando un batido espeso, pero chupar un poco hará que tu felación sea mejor. De esta manera, apretarás más tu boca, haciendo que la sensación sea más intensa para él. Si no haces un movimiento de succión, tu boca es un espacio hueco. Al chupar, tu boca está completamente apretada alrededor de su pene. Cuanto más fuerte chupas, más se aprieta.

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Contacto visual

Intenta establecer contacto visual de vez en cuando mientras haces una felación. Verás que esto lo excitará aún más. Verte disfrutar de su pene seguramente le hará llegar al clímax más rápido. Además, podrás ver cómo disfruta de tus habilidades.

Tú mandas

A veces notarás que tu pareja se mueve un poco durante la felación. Eso puede ser agradable y ayudarte con el ritmo. Pero algunos hombres son demasiado fanáticos y empujan su erección con fuerza y profundidad en tu garganta. Durante la felación, tú mandas, así que, si no te gusta, puedes y debes decirlo. ¿Te parece abrumador? Pues detén la felación, míralo sensualmente y di: “Aquí mando yo, así que tú quietecito” o “Quédate tranquilo y déjame mimarte”. Así es como transmites el mensaje de una manera sexy.

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¿Tragar o no tragar?

Y entonces llega el momento. Tu arduo trabajo no ha sido en vano y él está a punto de eyacular. Piensa si puede eyacular en tu boca, ya que no tiene por qué ser así. Si no te sientes cómoda al respecto, simplemente puedes decirlo. Por lo general, los hombres avisan de que están a punto de eyacular, así que puedes terminar el trabajo con la mano.

¿Quieres que eyacule en tu boca? Pues continúa con la felación. Si notas que eyacula y sientes el semen en tu boca, no te detengas de inmediato, sino que continúa muy suave durante un rato. Su semen sale en unas cuantas oleadas y, si te detienes demasiado pronto, su orgasmo será menos intenso.

¿Cuál es tu mejor consejo para dar una felación?